Muchas gracias Perry Farrell… aunque el
line up de este año no tenía tanto renombre como el año pasado, aunque el
Lollapalooza sudamericano tiene un marcado corte Pop (a diferencia del
magnífico Maquinaria), aunque el Parque O’Higgins se llenó de Hipsters y
engendros extraños, se agradece… se agradece que hayas pensado en Chile para
hacer un festival de esta envergadura.
Porque nos hacía falta como país un evento
que convocara tantos estilos en un solo gran lugar, que cultiváramos nuestra
tolerancia y diversidad, a los gustosos de buena música nos hacía falta que nos
bombardearan con recitales de tantos estilos diferentes, donde la brecha
generacional no existe… 31 Minutos, Foo Figthers, Skrillex, TV on the Radio…
debo reconocer que compré mi entrada pensando solamente en Foo Fighters, pero
que me fui más temprano pa’ cachar que era el Lollapalooza, y me sorprendí. Me
sorprendí del carnaval que se vivía en cada rincón, de la gente bailando, de la
alegría por doquier, es un verdadero Festival.
Que la entrada estaba cara, que una botella
de agua salía más de una luca, que había que hacer cola pal baño, sí, es
cierto, pero se podía estar todo el día en el parque sin aburrirse, pasar de un
recital a otro es orgásmico si las bandas son buenas, y las había, poco
conocidas pero las había.
Eso sí, el slogan de “Espíritu Verde” que
siempre acompaña al festival, parecía ser solo un slogan, los contenedores de
basura eran insuficientes (se llenaron a medio día), no estaba bien señalizada
su ubicación y no estaban bien rotulados, por lo que no sabías cual era para
plásticos, papel, etc. Es más, me habría gustado que el ministerio de medio
ambiente se hubiese hecho presente con contenedores de reciclaje, stand, etc. Era
una muy buena oportunidad de educar a las más de 250 mil personas que asistieron,
la mayor parte de ellos jóvenes, los más preocupados del medio ambiente.
Con todos sus defectos, Lollapalooza sigue siendo
El gran festival del año, excelente para pasar todo el día y vuelvo a agradecer
a Perry Farrell, porque como dijo el mismísimo Dave Grohl, si él, personalmente
no los hubiese invitado, Foo Fighters ni siquiera habría sabido que era ese
nimio país llamado Chile… esa es una razón más que suficiente para rendirle
pleitesía al gran Perry.