26 octubre 2007

Las Mujeres de mi vida


Aunque se que el titulo suena sugerente, ni lo piensen, hablar de tus ex siempre trae problemas, por eso, hablaré de las mujeres que hoy son lo mas importante que tengo en mi existencia.

Lado A: Mi madre padece de Osteoartritis, siempre ha tenido problemas con su cadera y ya acarrea una operación a cuestas. Nunca me han tincado mucho los doctores que ve porque siempre le dan los mismos remedios y nada es concreto. Por eso, y gracias a que estoy metido en este pendenciero mundo de la salud, es que quise traerla a hacerse exámenes específicos y a consultar la opinión del Dr. mas seco en la materia. Lo bueno es que sus exámenes salieron bastante buenos y el dictamen del medico fue bien optimista, íbamos con miedo porque todos los médicos le decían que tenia que usar prótesis de titanio y jubilarse anticipadamente, en cambio este wn seco le indico tratamiento kinesico y algunas cosillas para tratar de aminorar el dolor y patear la prótesis pa' mas adelante... le dio un poco mas de esperanza, la relajo un poco, algo que le hacia harta falta. Mi vieja siempre ha sido importante, eso es innegable, por eso me preocupo y la quiero mas que la mierda, porque como saben, ha sido todo para mi, porque ella es sabia, sabe siempre lo que me pasa y sabe como solucionarlo, ella es simplemente, lo mas grande que tengo.

Lado B: Hasta hace poco me consideraba desafortunado con las minas... nunca me gusto buscar minas en las discos, onda “encontré el amor en una pista de baile” pa' mi son patrañas... una porque no bailo mucho y otra porque los prejuicios de las minas en esas situaciones dan incluso para otro post (y lo escribiré con pica... ya van a ver). Así las cosas, llegó un momento en el que mi única posibilidad de conocer minas era que alguna amiga se apiadara y me invitara a un carrete con sus compinches.
Pero tras una larga historia de encuentros y desencuentros, me pegué el alcachofazo y me di cuenta de que el amor estaba mas cerca de lo que pensaba y la conocía mas de lo que creía.
Con la Lore fuimos compañeros de colegio, salimos de cuarto medio juntos, pero nunca paso nada, hasta tiempo despues, cuando estabamos en la U (ella en Psicología de la Andrés Bello y yo en Ingeniería en la U. de Valparaíso... na' que ver poh)... terminamos y volvimos, terminamos y volvimos, hasta que ahora en nuestro tercer round la relación es muy cuática, porque llevamos solo algunos meses, pero nos conocemos tanto que es como una vida entera. Aunque sea media odiosa como todas las mujeres, aunque sea media indecisa como todas las mujeres, aunque me pegue charchazos porque le tiro una talla o porque ronco, aunque siempre se le caiga un pedacito de cascara en los huevos a la copa... aunque nunca conteste el celular cuando la llamo y me llama a los dos minutos diciendo “es que lo tenia en la cartera” (hombres... pasa cierto?). Todas esas cosas siempre, pero siempre, van acompañadas de una sonrisa, y eso me deja tonto, me encanta, porque ella me tiene así, puede hacerme tumbar con solo una simple sonrisa.

Ahora, saben que es lo cómico del asunto?, es que se me ocurrió juntarlas... y para mi sorpresa, se llevan re bien... nunca habia visto a mi mamá tan entusiasmada con una nuera... se mandan mensajes de texto, se cagan de la risa juntas, se dan regalos... la cagó... ahora falta que se vayan a carretear y se encierren en un femenino... a esta altura ya no me extraña.
En fin, mis mujeres importantes, ellas, las que orbitan mi mundo y me hacen parte de una galaxia de cariño que hace tiempo necesitaba consolidar. Un beso para ambas... la Vicky y la Gaby... jajaja.

09 octubre 2007

Vieja, sacate el delantal, quiero verte empelota!!!... tenemos casa nueva


Al terminar la Universidad, tuve que dejar de lado los mágicos rincones y amados parajes de Valparaíso, para recalar en la estresada y sobre agitada vida de la capital, no quería, pero para crecer profesionalmente tenia que aventurarme en la selvática metrópolis.

Por suerte tenia amigos que estaban en la misma y juntos convivimos un año y medio acostumbrándonos al ajetreo capitalino, arrendamos un departamento gigante e instauramos nuestra propia Granja VIP.
Luego, me fui a vivir solo, como un desafío personal, arrendé un depto enanísimo (el nicho, como le dice mi primo Juan) pero suficiente para mi, hasta ahora.
En estos 3 años de arrendar deptos y conocer la ciudad siempre he estado pendiente de alguna oportunidad para dejar de alquilar y definitivamente comprar una propiedad, como una forma de inversión mas que el “sueño de la casa propia”. Pues bien, últimamente he visto hartos deptos en ubicaciones buenas y mas o menos alcanzables en cuanto a dinero. Pero siempre terminaba decepcionado, o por el precio o por el tamaño (hay que ver como hacen de chicas estas cosas). Pero mi compadre Javier, acompañado de su ya flamante esposa Pola, (que también están buscando donde comprar) me dijeron un día “Oye wn, vamos a ver unas casas, nos acompañas?, en una de esas te tinca alguna”... a lo cual repliqué con pusilánime escozor “pero, casa?, que voy a hacer yo en una casa?, ademas salen re caras”... pero fui igual, y realmente me impresionó.
Fuimos a la Ciudad de los Valles, una especie de ciudad satélite a 12,5 kms. de Santiago por la ruta 68 (camino a viña) y los precios eran mas que aceptables... es mas, una casa de 3 dormitorios y 3 baños sale la mitad de lo que sale un departamento de 2 dormitorios al lado del metro en providencia, ademas, el lugar es increíble, puedes ver a lo lejos la nube de smog y la brisa se siente de manera exquisita en la cara al atardecer. Y como yo soy de campo, o sea, soy un huaso, pero con estilo... algo así como un “Huasolais”... me gusta la tranquilidad y el aire libre, el canto de los pajaritos y todas esas weas... me decidí al día siguiente... me compro una casa... encalillado hasta el 2037 (y no es chiste), pero voy a tener algo mio por fin.
Encontré el lugar ideal (como les dije antes en: “Los descargos de un huaso suelto en la gran ciudad”), no me gusta santiago y siempre que puedo trato de hacerle el quite, pues bien, encontré un lugar que queda relativamente cerca (20 minutos del centro por la costanera norte... no es malo) y que me da esa tranquilidad que ando buscando... y pa' mas remate, mi amigo Javier se compro la casa que esta justo atrás, es decir, nos separa una pandereta, así que absolutamente solo no voy a estar.
En diciembre me cambio de casa, ahora si al lugar definitivo, dejo mi eterno migrar por la capital para irme a un hogar mas tranquilo, me cambio en diciembre y se vendrán entonces la seguidilla de asados de inauguración, porque como dijo Tito Fernández... “tenemos casa nueva y hay que inaugurarla”.