Vieja, mi querida vieja

Hace tiempo que no salía de vacaciones con mi vieja, la pega de ella, la Universidad y ahora ultimo mi trabajo siempre terminaban por no coordinarnos, hasta que este año se alinearon los planetas y encontré que tenía que saldar esa cuenta pendiente… pesqué a mi vieja y a mi tía Juana (Que es como mi segunda mamá) y nos fuimos unos días a la playa, arrendamos una cabaña en Maitencillo y no instalamos a relajarnos un poco. Lo pasamos súper bien, pero al margen del viaje, es rico sentir a mi madre al lado, porque ella ha sido pilar fundamental en mi existencia.
Mi madre, esa que tuvo que sortear los escollos que significa ser madre soltera y criar a un cabro chico con sangre, sudor y lágrimas, sola, completamente sola. Si me pidieran que describiera a un súper héroe les pongo a la Súper Rosa en un póster gigante… porque yo la vi trabajando de lunes a domingo para sobrellevar una familia. Yo la vi trapeando pisos y trabajando de noche para darme de comer, yo la vi haciendo muchos sacrificios para que yo saliera adelante, así… con esa enfermedad crónica a la cadera y todas las batallas encima, no hay nada ni nadie que se pueda comparar a su empuje y coraje.
Reconozco que soy pésimo para expresar sentimientos, muy pocas veces le digo que la quiero mucho, yo se que ella lo sabe porque se lo demuestro, a mi manera pero lo hago, pero siempre es bueno expresarlo abiertamente y esta es una forma de hacerlo… vieja… te quiero caleta.